Por Lujan Gambina. IG: @lupegambina
Esta semana elegimos 3 novelas que nos permiten pensar en lo que es y soporta una familia, ampliando los límites de las definiciones tradicionales.
Familia – Grupo de personas emparentadas entre sí que viven juntas. 2. f. Conjunto de ascendientes, descendientes, colaterales y afines de un linaje.
Los sorrentinos, Virginia Higa
Aproximadamente el 50% de la población de Argentina, unos 27 millones, es de origen italiano. En los albores del siglo XX, entre los miles de inmigrantes que llegaban a lo largo y ancho del país, desembarca en Mar del Plata la familia Vespolini. Allí deciden abrir una trattoría, sin descuidar la batalla incansable de todo tano contra la mishadura y así nace no sólo un mito marplatense que sigue vivo al día de hoy sino la base para esta novela, donde encontramos la historia de una estirpe y la de casi la mitad de la nación.
Las planchas de masa especial de los sorrentinos, las salsas, los rellenos… las voces siempre en alto y los rumores atravesando las largas mesas familiares. Escenas cotidianas relatadas con frescura y épica, así debuta Virgina Higa con una historia sencilla de una famiglia y sus avatares. Se entremezcla la añoranza de la tierra originaria, la intriga de la profecía por venir y todos los lazos que unen y desatan padres, abuelos, tíos, primos y toda la parentela.
BONUS TRACK: El local ubicado en el centro de La Feliz conserva intacta su esencia y se puede visitar. Allí, los sorrentinos son el plato fuerte y superan la ficción.
Las primas, Aurora Venturini
Una casa habitada sólo por mujeres, todas minusválidas, con alguna deformidad física o mental. Hombres que rondan trayendo discordia y peligro. La novela de Aurora Venturini está relatada en primera persona, en la voz de Yuna, su protagonista. Con una mirada salvaje y despojada, su prosa pone en jaque las convenciones del lenguaje literario y no es la narración de una historia sino la creación de la misma sobre la marcha.
Lo más llamativo de la propuesta de Venturini es la manera en la que Yuna piensa y escribe, a través de una verborrea descontrolada sin puntuación en las frases y la continua consulta al diccionario para poder completar las oraciones. El relato se va enriqueciendo en la misma manera en la que lo hace su protagonista, complejizando su historia capítulo a capítulo.
Una historia deforme. Una vida repleta de calamidades. Una voz atípica relatando la historia de una familia que se ve rara en las fotos.
¿La perlita? Aurora Venturini fue amiga de Evita, y así inicia el prólogo donde lo relata: Tuvo una vida tan fugaz y tan intensa que cuando pienso en ella me parece un sueño. Yo conté con el privilegio de su rara amistad y les aseguro que nunca nadie me maltrató tanto, ni me quiso tanto como Eva Perón.
Todo nos sale bien, Julia Coria
Lo sobresaliente de la novela de Julia Coria bien podría ser todos los lugares comunes que nos ahorra para llevarnos al único lugar ineludible: la muerte. Relato en primera persona de una mujer, una esposa, una madre, una escritora desde el diagnóstico hasta el final cantado, paseando por los recuerdos que construyeron una historia de amor tan bella como realista. Viajes, bibliotecas, crisis, mascotas y dos hijos que esperan respuestas al enigma indescifrable de la muerte del padre.
No es desde el dolor, aunque hay desesperación y vulnerabilidad. Es rearmando el rompecabezas de la historia de pareja y la construcción de la familia. La odisea personal de una familia lidiando con la enfermedad, encontrando la forma de acompañarse y salir a flote.
Dato de color: Los capítulos de la novela empezaron como anotaciones en cuadernos donde Julia Coria registraba lo que pasaba cada día, hasta que finalmente le dio forma. “Escribí Todo nos sale bien en dos meses. Lo corregí en un mes, lo mandé a Odelia Editora y a la semana me dijeron que lo querían y al mes salió publicado”.
Nota: Lujan Gambina
