Por Geronimo Damian Araquistain. IG: @geroaraquistain
No debe haber porteño que no haya visto un mural suyo. Son más de 300 y están en todas partes. Su estilo está presente en edificios, casas y galerías comerciales. Sin embargo, muy pocos saben quién es.
La obra mural de Rodolfo “Rolo” Bardi (1927-2001) impacta por lo prolífica y por su presencia en casi todos los barrios porteños. Desde Belgrano, Núñez, Palermo y Recoleta a San Telmo, Barracas y La Boca, pasando por Montserrat, Almagro, Caballito, Flores, Parque Chacabuco, Villa Crespo y Liniers.
Luego de años de dedicarse a la pintura y adquirir una mención de honor en la V Bienal de San Pablo y el premio adquisición en el Salón de Arte Moderno de Mar del Plata en 1959, Rodolfo Bardi comenzó a producir murales en ingresos de edificios y viviendas particulares.
Según consigna Cecilia Belej en el libro “Rodolfo Bardi” publicado en 2021 por YoEditor, este cambio de dirección en su carrera artística lo llevó a producir obras que se despliegan en el contexto de lo cotidiano. Es a partir de aquí que Bardi se dedica a la producción de trabajos que no tienen como destino el museo o la galería de arte, sino que acompañan la vida del hombre y la mujer común en el hogar, en la oficina o en las calles.
A lo largo de dos décadas su obra mural atravesó diferentes períodos que se solaparon y convivieron. Bardi también exploró diversas técnicas de bajorelieve en cemento coloreado con incrustaciones de metales y esmaltes. En este viaje desde la abstracción geométrica hasta la figuración decorativa, trabajó con cemento, madera, azulejo, lajas, ladrillos, vidrios y otros materiales.
Contexto:
Los murales de Bardi suceden en simultáneo con el auge de la construcción masiva de edificios de departamentos para la clase media en la década del 60. A partir de aquí, la necesidad de jerarquizar los halls de acceso permitió la proliferación de este tipo de obras que sintonizan con la arquitectura de aquella época.
El uso de este tipo de murales funcionó no solo como elemento decorativo, sino que fue incorporado a la arquitectura como una licencia que permitiera subjetivar y sacar del anonimato al edificio.
Presente:
Hoy, si bien buena parte de sus murales se encuentran mantenidos, otros tantos han sufrido el deterioro del paso del tiempo y la falta de conciencia respecto al valor de patrimonial que estas obras representan.
En este sentido, Valeria Bardi, una de las hijas del artista, a partir de anotaciones en agendas encontradas en el taller de su padre, comenzó a recopilar uno a uno los murales realizados por su él desde 1960 a 1983.
En esta búsqueda, encontró que algunos murales fueron demolidos y otros modificados obedeciendo a necesidades funcionales que los vecinos de los edificios consideraron más apropiadas o útiles para su vida cotidiana.
Este gran trabajo de investigación y las obras encontradas puede seguirse desde la cuenta de Instagram @murales_bardi.
A su vez, ya se encuentra en librerías la publicación “Rodolfo Bardi” de las autoras María Cristina Rossi y Cecilia Belej (Editorial YOEditor.)
Este libro analiza obra y trayectoria de Rodolfo Bardi, haciendo un recorrido por su producción de carácter abstracto en las distintas disciplinas en las que se desempeñó, incluyendo dibujos, pinturas, experimentación cinematográfica y murales.
Plan sugerido:
Para los amantes de los planes culturales alternativos, la recorrida por los murales de Bardi es una excelente opción. Existen tantos y en barrios tan diversos, que a la hora de planear la caminata es mejor armarse de un recorrido.
Nosotros sugerimos dos: el de Villa Urquiza y el de Belgrano / Barrio Chino (podes descargarlos haciendo CLICK en el nombre del barrio).
En el siguiente link vas a poder ver un mapa con la ubicación de todos los murales para entender la magnitud y lo prolífico de este artista y armar tu propio recorrido 🙂
Es tal vez la peculiar costumbre humana de naturalizar lo cotidiano lo que hace que este tipo de obras pasen desapercibidas. Es de vital importancia que los vecinos conozcan esta historia y defiendan el valor de lo propio.